Hoy quiero compartir con vosotros una triste historia que acontenció en la costa de Cartagena en el año 1906: el naufragio del "Sirio".
Mi paisano, Santiago Delgado (docente y escritor), en su blog nos trae a la memoria este triste suceso.
El buque llamado "Sirio" partió de Italia, de Génova (¿os suena?) llevando abordo a un gran número de inmigrantes que tenían la esperanza de encontrar una vida mejor cuando llegaran a Buenos Aires. La avaricia del capitán hizo que finalmente el barco se hundiera al chocar contra los escollos de las "Islas Hormigas" (uno de los yacimientos submarios con más pecios, y de más culturas, de todo el Mediterráneo). Este suceso fue muy sentido y así nos lo cuenta Santiago, como antes lo contó María Cegarra (escritora).
"Por fin he encontrado esta canción, memorable, que expresa la pena italiana por los náufragos del Sirio, paquebote italiano, que, en Agosto de 1906, se fue al fondo del mar, lleno de emigrantes que huían de la penuria y la miseria, al tropezar con los escollos de las Islas Hormigas, junto a Cabo de Palos, cerca de Cartagena, en la Provincia de Murcia, España. El suceso causó fuerte impresión en toda la comarca. No os oculto que he sollozado al escuchar la canción. Y me pregunto si es posible que alguien traiga un coro ligur, piamontés o lombardo, para que cante estas sublimes notas de desconsuelo, en el incomparable marco del Festival del Cante de las Minas, en La Unión, principal población más cercana al desgraciado naufragio, causado según últimas investigaciones, por la codicia de coger más pasajeros, y su dinero por el billete de viaje. Una poeta local, pero universal de sentimiento, María Cegarra, cantó inmortalmente a una de las monjas que atendían a los pasajeros, y que fuera enterrada en la misma playa: (http://oficiodescribir.blogspot.com/2010/10/miguel-hernandez-maria-cegarra-el-sirio.html )
E da Genova In Sirio partivano Per l’America varcare Varcare i confin. Ed a bordo Cantar si sentivano Tutti allegri Del suo destin. Urtò il Sirio Un orribile scoglio Di tanta gente La misera fin. Padri e madri Bracciava i suoi figli Che si sparivano Tra le onde del mar. E fra loro Un vescovo c’era Dando a tutti La sua benedizion. | Desde Génova en el Sirio partieron para alcanzar de América el confín. Y, a bordo, cantar se escuchaba, todos contentos de su porvenir. Chocó el Sirio contra un terrible escollo, de tanta gente el mísero fin. Padres y madres abrazaban a sus hijos, que desaparecían entre las olas del mar. Y entre ellos había un obispo dando a todos su bendición. |
¡Cuantas veces he oido contar lo del naufragio en Cabo de Palos! pero hasta hoy no he sabido la verdadera Historia.
ResponderEliminarLa canción es muy bonita
Gracias Olga por esta mirada al mar...
El Atlántico ¡cuanto sabe de idas y venidas!
Aunque esta vez..fue el Meditarráneo quien los acogió en su interior.